
EE.UU. lanzará moscas sobre México para frenar una plaga letal que devora carne viva: ‘Es un logro histórico’
El modelo estadounidense sirvió de inspiración para campañas similares en América Latina, el Caribe, África e incluso Asia, aunque los desafíos logísticos y económicos de estas campañas siguen siendo elevados.
Estados Unidos ha puesto en marcha un plan de control biológico de proporciones gigantescas: criará miles de millones de moscas macho del gusano barrenador del ganado (Cochliomyia hominivorax), las esterilizará con radiación y las liberará por vía aérea sobre el sur de Texas y México. El objetivo: eliminar una plaga parasitaria que amenaza con desestabilizar la industria cárnica de ambos países.
Este método ya se usaba en los años 60
Este método, lejos de ser ciencia ficción, ya se aplicó con éxito en los años 60 y 70 en campañas conjuntas entre EE UU y México. La técnica, conocida como técnica del insecto estéril (SIT, por sus siglas en inglés), está considerada como una de las estrategias de control de plagas más eficaces y sostenibles jamás desarrolladas, y ha sido respaldada durante décadas por la Organización de las Naciones Unidas y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que participa proporcionando la tecnología de irradiación.
¿Qué es el gusano barrenador del ganado?
Este insecto, en su fase larvaria, pone huevos en heridas abiertas o mucosas de animales de sangre caliente —incluidos seres humanos—. A diferencia de otras especies de mosca que se alimentan de tejidos muertos, el barrenador devora carne viva, provocando graves lesiones, infecciones, pérdida de peso, reducción de la producción lechera e incluso la muerte del animal. Su impacto económico es enorme en regiones ganaderas.
La larva fue erradicada del norte de América Latina y Norteamérica en décadas anteriores. Pero en noviembre de 2024, las autoridades sanitarias mexicanas confirmaron su reaparición en el sur del país, lo que obligó al Gobierno estadounidense a cerrar temporalmente su frontera sur a la importación de animales vivos en mayo de este año.
El plan de EE UU consiste en:
- Criar moscas macho en laboratorio.
- Esterilizarlas mediante radiación ionizante (rayos gamma o rayos X).
- Liberarlas por vía aérea en zonas específicas donde se ha detectado actividad de la plaga.
Estas moscas estériles compiten con los machos fértiles por las hembras. Cuando una hembra se aparea con un macho estéril, los huevos que pone no se desarrollan, por lo que la población empieza a decrecer hasta extinguirse localmente.
La técnica se basa en un principio de competencia biológica y tiene varias ventajas frente a los pesticidas tradicionales: No deja residuos químicos; no daña a otras especies ni al medio ambiente; y no genera resistencia, a diferencia de los insecticidas.
Según Edwin Burgess, profesor adjunto de la Universidad de Florida experto en parásitos del ganado, se trata de “un logro histórico en la aplicación de la ciencia al control de plagas”. Para él, esta tecnología sigue siendo una “arma indispensable” frente a rebrotes inesperados.

Una nueva fábrica de moscas… y más allá
El Departamento de Agricultura de EE UU (USDA) tiene previsto inaugurar en julio de 2026 una nueva planta de producción de moscas estériles dedicada exclusivamente al gusano barrenador, y ya está trabajando en un centro logístico en el sur de Texas para almacenar y distribuir insectos desde instalaciones en Panamá, donde se mantiene una barrera biológica contra la expansión del insecto hacia el norte.
En palabras del USDA, la respuesta debe ser contundente: “lo que se creía bajo control puede resurgir en cualquier momento si se relajan las medidas de prevención”.
Fuente: Vandal Random.