Vecinos de La Zurza siguen usando agua del río Isabela

ADVERTENCIA. EL MINISTERIO DE SALUD PÚBLICA EXHORTÓ A ABSTENERSE DE UTILIZAR AGUAS DEL RÍO ISABELA.

En el sector La Zurza del Distrito Nacional, donde han sido detectados los primeros casos de cólera en República Dominicana, pese a la nueva ola bacteriana, los residentes continúan utilizando la misma fuente de agua, posiblemente contaminada.A pesar de la intervención del Ministerio de Salud Pública y la Cruz Roja Dominicana, quienes han instalado cuatro contenedores de agua supuestamente saneada en la boca de la “Zurza Abajo”, donde se mantienen en la actualidad cuatro casos activos de cólera, la gente del lugar continúa prefiriendo la comodidad de tomar el agua que llega a sus hogares, por encima de la “sanidad”.

“El agua a veces llega con pajas verdes, grasosa, sucia o con mal olor, y cuando está así yo no la cojo”, contó María Victoria, quien agradeció la intervención ayer de las autoridades sanitarias.Sin embargo, contrario a María, diferentes personas que hacen vida en el lugar refirieron a periodistas del Listín Diario que la intervención del Estado en busca de “mejoría o prevención” ha sido insuficiente.“Dime tú, ¿qué gana uno con que vengan y pongan un tanque de agua ahí abajo si sigue la misma basura en todas partes?”, dijo Pulman Cena, quien aseguró que tiene más de cuarenta años viviendo en el lugar y nunca se ha enfermado ni ha sentido daños provocados por la que llama “supuesta contaminación” de las aguas.

A costa de esto, ante los ojos de los periodistas, Cena salió de la poza cristalina de La Zurza, de la que en el fondo se observar los residuos de plástico, gorras, restos de ropa y basura; y además, llenaba galones y cubetas en su casa con el agua que afirmó que llega desde un acueducto conectado al tanque de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), que suple al mercado de la barriada.

Según las opiniones de moradores, es poco lo que ha cambiado en cuanto a los cuidados que toman ellos de su propia mano para evitar contraer el cólera, pero también plantean que las decisiones salubres del gobierno para con ellos como primer lugar de República Dominicana en reportar casos de la enfermedad, no han sido más que deficientes.“Sí, ellos vinieron, el ministro de Salud (Daniel Rivera) pasó por aquí y se tiró un par de fotos, pero con eso no se va a solucionar nada. Dieron cloro, y es verdad que ahora hay más cloro, pero eso no va hacer la diferencia. Nosotros hablamos con ellos y les recomendamos que vengan, y que esa poza le pasen el rastrillo y que limpien esto aquí para ver de verdad donde es que está el problema, porque es que así no se va a solucionar nada”, afirmó un residente que se identificó como Flemin.

En el barrio, únicamente en la calle central es donde se notan los operativos de limpieza, por lo demás, en cada espacio por el que se camina hay residuos sin recoger, e incluso, en los puntos de paso de los camiones del Ayuntamiento se nota recorrido de los mismos, no obstante, queda el reguero de las fundas sueltas y los desechos que se salieron de las bolsas y no fueron levantados de ahí.Indistintamente, algunas personas sí han tomado la decisión de suplirse de los tinacos de la Cruz Roja, mientras el Ministerio de Salud ha dejado instaladas dos carpas para atenciones médicas de urgencia en el área.

“Si una persona presenta los síntomas viene aquí y nosotros estamos habilitados para darle las atenciones necesarias… Estaremos aquí hasta que el ministro y la circunstancias lo determinen”, dijo el intendente del Área IV de Salud y encargado de epidemiología, doctor Jesús Suardi, al indicar que hasta el momento no han recibido casos sospechosos de cólera.Igualmente, personal de la CAASD realiza desde hace veinte días análisis correspondientes en el agua de diferentes afluentes para descubrir o descartar la posible presencia de bacterias.

A pesar de la inconformidad colectiva, los cuidados sí han empezado a llegar a La Zurza, pero en los sectores con los que colinda las autoridades aún se muestran indiferentes a que la cercanía podría ser un indicador de futura expansión.“Por aquí no ha pasado nadie, de ningún sitio ni nada por el estilo. Aquí yo tomo los cuidados porque sé y uno lee las noticias y yo vendo comida, por eso uno mantiene su cloro y trata de tener la mejor higiene, pero por aquí nadie ha dicho nada”, dijo Rafael Villalona, un vendedor de empanadas en Puerto Isabela II.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *